Por lo general, los atletas suelen utilizarla para los músculos adoloridos, mientras que los jardineros suelen rociarlo sobre las plantas para aumentar su crecimiento. La sal de Epsom tiene una historia larga y diversificado en cuanto a los beneficios para la salud, belleza, limpieza del hogar y jardinería al aire libre.
En primer lugar, se preparaba a partir del agua mineral, mientras que hoy en día se obtiene, principalmente, de las operaciones mineras.
La sal de Epsom es un remedio natural exfoliante y antiinflamatorio que puede usarse para tratar dolores comunes y dolores musculares, piel seca, e incluso para combatir diferentes problemas de salud internos. De hecho, hay quienes utilizan algunas recetas de baño de desintoxicantes a los cuales se les añade Sal de Epsom.
Composición química
La sal de Epsom deriva su nombre de un manantial salino amargo ubicado en Epsom, Surrey, Inglaterra. Desde allí el compuesto se destiló por primera vez del agua. Es diferente a las sales tradicionales, sobre todo porque en realidad es un compuesto mineral de magnesio y sulfato.
La fórmula química del sulfato de magnesio es MgSO, que muestra que la sal de Epsom se puede descomponer en magnesio, azufre y oxígeno. La sal de Epsom se compone de pequeños cristales incoloros y tiene un aspecto muy parecido al de la sal normal. No obstante, como ya hemos comentado, la sal de mesa es diferente porque se compone de cloruro de sodio.
Beneficios de la sal Epsom
Aumenta los niveles de magnesio
Los niveles recomendados y adecuados de magnesio son la clave para una buena salud en general. De hecho, es muy común tener deficiencia de magnesio.
Los niveles bajos de magnesio se conocen como hipomagnesemia, y pueden ser causados por alcoholismo, diarrea severa, desnutrición o niveles altos de calcio. Simplemente remojando los pies o en todo el cuerpo en agua que contenga sal de Epsom los niveles internos de magnesio pueden aumentar naturalmente sin la necesidad de tomar suplementos de magnesio.
El magnesio también regula más de 300 enzimas en el cuerpo y juega un papel importante en la organización de las funciones corporales, entre los cuales se incluye el control muscular, la producción de energía, los impulsos eléctricos y la eliminación de toxinas dañinas. La deficiencia de este mineral podría conducir a enfermedades cardíacas, artritis, osteoporosis, síndrome de fatiga crónica, trastornos digestivos y enfermedades mentales.
Reduce el estrés
Las personas por lo general recomiendan tomar un buen baño tibio luego de una tarea difícil, bien sea que se trate de una tarea física o mental. Se dice que esta es una excelente forma de combatir el estrés.
En el caso de que quieras reducir el estrés luego de un día largo, agregar un poco de sal de Epsom al agua de tu baño puede ayudarte.
Algunos estudios demuestran que el magnesio tiene un efecto profundo sobre el estrés, por lo que las sales de magnesio como la sal de Epsom puede ser eficaz para disminuir el estrés.
Elimina las toxinas
Los sulfatos de este compuesto químico ayudan al cuerpo a expulsar todas esas toxinas y a proporcionar una desintoxicación de metales pesados todas las células del cuerpo, por lo cual se reduce la acumulación interna de sustancias nocivas para la salud.
Alivia el estreñimiento
La sal de Epsom es un laxante usado comúnmente para aliviar el estreñimiento de forma natural. Cuando se toma internamente, la sal de Epsom actúa como un laxante aumentado el agua de los intestinos, ayudando a limpiar el colon de desechos.
Reduce el dolor y la inflamación
Tomar un baño de agua tibia con sal de Epsom también puede ayudar a aliviar el dolor y la inflamación producto de muchas enfermedades. Es el tratamiento ideal para tratar el asma bronquial, los dolores musculares y los dolores de cabeza.
Mejora los niveles de azúcar en la sangre
Los niveles saludables de magnesio están directamente relacionados con un menor riesgo a desarrollar diabetes. Precisamente la sal de Epsom es una excelente fuente de magnesio que puede ayudar a mejorar la capacidad del cuerpo para producir y utilizar insulina.
Revitaliza el cabello
Agregar sal de Epsom a los productos del cabello puede contribuir a eliminar el exceso de aceite que hace que el cabello luzca plano y pesado. En ese caso es muy fácil agregar dos cucharadas de cristales de epsom al champú o acondicionador.
Usos de la sal de Epsom
Cuando se trata de uso externo de la Sal de Epsom lo mejor es remojar todo el cuerpo en agua tibia con una o dos tazas de Sal de Epsom durante, por lo menos, 20 minutos. Para el uso interno de la sal de Epsom, lo mejor es seguir las instrucciones del empaque.
Por otra parte, si quieres embellecer tus plantas, podrías rociarle un poco de sal de epsom y así evitar que sean objetos de picaduras de insectos o quemaduras solares.
La sal de Epsom también puede utilizarse en cuanto a la limpieza doméstica.
Conclusión
Como podrás haber visto, aunque el epsom se considera un tipo de sal, esta es totalmente diferente a la Sal de Epsom en su composición.
Sin embargo, suele ser muy beneficiosa para el organismo.